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Foto del escritorJosé Lurker

Cocaína

"Parece cocaína / Pero "Es sólo tristeza". ;

Hace un tiempo. (Legião Urbana)


Mi nombre es J., soy un adicto y por hoy estoy limpio. Abusé de muchas drogas (marihuana, alcohol) y probé de todo: hongos, LSD, morfina, ketamina, diazepam, clonazepam, lorazepam, anfetamina, MDMA. Creo que la lista termina ahí. Pero siempre fue la cocaína la que me hizo besar la lona. Recuerdo la primera vez que lo usé. Estaba acostumbrado a drogas cuyos efectos eran muy evidentes. Olí algunas líneas con un amigo. Murió de SIDA después de algunos intentos infructuosos de dejar de consumir cocaína inyectable: el "ruido sordo" y compartir agujas y jeringas. Triste. Una vez me dijo que había contrabandeado cocaína a personas poderosas en los años 1980 a cambio de unos pocos gramos. En ese momento glamourizamos las drogas , pensamos que morir antes de los 30 años fue la único proyecto posible. De todos modos. No tuve grandes sensaciones cuando la consumí por primera vez y la mayor emoción fue probar la cocaína. Es importante recordar que la cocaína, en aquella época, era cara y había muy poca disponibilidad. Se rumoreaba, discretamente, que tenían acceso fulano de tal, unos latinoamericanos que estaban en el país a estudiar y un americano que vivía en la ciudad. Una droga misteriosa. La droga de la élite. Fiestas llenas de champán, con cocaína servida en bandejas de plata, esnifada en billetes de 100 dólares. Los artistas, las artistas. Los millonarios. Sólo escamas de pescado (se decía que era la droga más pura, que emitía brillo con la luz). Viví un tiempo en una ciudad del interior de.... y allí la disponibilidad de drogas era enorme. "Nevó". Eran tiempos de euforia. La factura se pagaría más tarde. Y sería muy caro. Me mudé a una gran ciudad y seguí consumiendo múltiples sustancias. Hasta el día en que mi mundo cayó. Como decía Renato Russo en Faroeste Caboclo "y al carajo se fue por primera vez". Yo también.

Inundemos Brasil de cocaína

Escuché que el PCC realizó una negociación con los cárteles colombianos a principios de los años 1990: estamos va a inundar Brasil con cocaína. En ese momento yo estaba limpio. Bueno, eso no es todo. Después de 2 años limpia, después de una estancia en el hospital, había vuelto a beber bebidas fermentadas y fumar marihuana. Esto continuó durante muchos años. Pero me mantuve alejado de la cocaína. Una noche - me había separado y vivía solo, después de beber un poco ( en ese momento no existía la ley seca ), iba conduciendo a casa y pasé por una favela. Un tipo me saludó con algo que no pude identificar: "Oye, Joe, ¿qué pasa?" . Obviamente sentí curiosidad y regresé. "¿Cuánto cuesta? Derreal (Diez reales , la moneda brasileña). Dame 1”. Era polvo. De excelente calidad. Lo llamaban dado porque estaba sacado directamente del ladrillo. También estaba Faustão, que era 5g. Ese año fue realmente una locura. Terminé en la clínica nuevamente, porque comencé a usarlo cada quince días, luego semanalmente, luego varios días a la semana, hasta que estuve usándolo diariamente durante un año sin parar, al final unos 7g por día. Me volví loco. Ya no comía, dormía poco, en una especie de vértigo permanente que no conocía principio ni fin. Después de un viaje en el que mi familia tuvo claro la gravedad de la situación, consulté a mi psiquiatra un domingo y comencé a usar disulfiram, un antagonista del alcohol, y dejé de beber . Ya había dejado de fumar marihuana hace unos años. Al reavivar una relación, pude mantenerme sobrio durante 1 mes. Fue entonces cuando mi adicción cambió sus características: en lugar del uso diario de la droga, cambié a otra forma de consumirla: atracón, que significa el uso compulsivo y prolongado de la droga, común con la cocaína y el alcohol. Y luego los desastres fueron cada vez más graves: No podía parar y gastaba fortunas; hace algún tiempo, durante mis borracheras, me permitía basfond. No entraré en detalles, pero experimenté todo lo peor que puedas imaginar. Cientos (sí, cientos) intentos de dejar de consumir, más de una docena de hospitalizaciones (muchas más) y siempre terminaba recayendo. Dos matrimonios destruidos, pérdida de empleos, quiebra económica, enfermedades... Perdí el sentido del olfato durante más de un año (y cosas peores). Probé el cambio geográfico... Llegué al fondo ( tal vez) ? Varias rehabilitaciones. He aquí una nota: aunque son predecibles, porque nadie puede soportar vivir con un adicto activo (o experimentarlo mal, muy mal), las separaciones y los finales de relaciones son puro veneno para la mayoría de los adictos. La recuperación necesita ser muy sólida para que puedan afrontar estas situaciones con madurez. ¿Con qué frecuencia escuchas en los grupos de Ayuda Mutua “bueno, terminé una relación” o “después de mi divorcio/separación”? ...y aquí viene la historia de una recaída a menudo brutal. Como siempre dicen, me alegro de que hayas vuelto. Muchos no pueden.

Una luz al final del túnel: la recuperación

¿Es posible recuperarse del consumo de cocaína? Sí, como cualquier otra droga. Las posibilidades son ridículas, alrededor del 13%. En otras palabras, el 87% de los adictos (considerando el alcoholismo como una adicción) viven en un vaivén de avances y retrocesos y muchas veces pierden la batalla por una razón u otra. Algunos mueren. Otros nunca se recuperan. Ni siquiera lo intentan. Hablaremos de Recuperación para adictos a la cocaína en otro momento. Pero ya hemos apuntado a una Recuperación Holística. Otra vida. Físicamente. Mentalmente. Espiritualmente. Sin estos (Doce) Pasos, no llegarás muy lejos .




Esta imagen fue capturada en Pinterest en el perfil Ego del estigma.

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